Se necesitan cantidades adecuadas de potasio para el funcionamiento normal de las células, los músculos, los nervios y órganos esenciales como los riñones y el corazón. Su organismo puede verse privado del potasio que necesita si vomita sin cesar o si sufre diarreas continuas y consume diuréticos durante un largo periodo de tiempo. Un nivel inadecuado de potasio en sangre se conoce como hipopotasemia. Algunos estudios señalan la ingesta excesiva de alcohol, la sudoración profusa, el consumo habitual de laxantes / ablandadores de heces, etc. como posibles causas de un descenso de los niveles de potasio. En este medio, ¿se puede tomar cloruro potásico junto con fármacos diuréticos como la furosemida? Es de sabios saber más sobre esto.
Un nivel bajo de potasio en sangre suele ser consecuencia de diarreas y vómitos. En algunos casos, no añadir suficientes alimentos con potasio a la dieta diaria también puede provocarla. Los alimentos ricos en potasio son los plátanos, las pasas, las espinacas, el aguacate, los boniatos, etc. La falta de potasio adecuado se conoce clínicamente como hipopotasemia. También puede aparecer cuando se toman fármacos que pueden hacer que se orine más. Estos fármacos se conocen comúnmente como diuréticos. La furosemida es un fármaco diurético ampliamente utilizado.
El cloruro potásico y sus usos
Se trata de un medicamento complementario que se toma para detener la pérdida de potasio en la sangre. El potasio desempeña un papel clave en la transmisión sin fisuras de las señales nerviosas, el funcionamiento de los músculos cardíacos y el funcionamiento eficaz de los riñones. La insuficiencia de este mineral puede producirse cuando hay una pérdida más rápida de esta sal, es decir, cuando la pérdida es más rápida que la tasa de suministro. Los signos típicos de un nivel bajo de potasio son bastante claros: debilidad general del cuerpo, latidos erráticos, cansancio, etc.
En el caso de las personas que necesitan un tratamiento a largo plazo para la hipertensión arterial, mediante la administración de diuréticos, se utiliza cloruro potásico como suplemento. Asimismo, en caso de niveles bajos de potasio debido a una acidosis metabólica, se administran suplementos como citrato potásico o bicarbonato potásico. En caso de agotamiento de este mineral debido a los diuréticos, las dosis pueden variar en función del grado de agotamiento. Para tratar el bajo nivel de potasio, la dosis típica es de 50 a 90 mEq entre los adultos; para los niños de hasta 15 años – la dosis se mantiene en unos 3 mEq cada día. Para prevenir la aparición de una bajada de potasio, la dosis se sitúa en 18 mEq al día para los adultos, mientras que es de casi 2 mEq para los niños. Este suplemento se toma por vía oral.
Al tomar este suplemento mineral, hay que tener en cuenta sus posibles efectos secundarios. Entre ellos son comunes la acumulación de potasio (conocida médicamente como hiperpotasemia), las hemorragias internas y las afecciones abdominales como náuseas, vómitos o indigestión. Si padece alguna alergia o hipersensibilidad previas al cloruro potásico o al citrato potásico, es importante que informe a su médico de tales condiciones. Además, quienes padezcan problemas renales o afecciones como la enfermedad de Addison deben mantener informado a su equipo de cuidadores sobre estos problemas. Recuerde siempre que este suplemento se toma siguiendo las instrucciones de su médico tratante. Nunca se consume a través de la automedicación o como suplemento de venta libre (OTC).
¿Qué es la furosemida?
La furosemida se consume para reducir el exceso de líquidos en el organismo. Este medicamento pertenece a una clase denominada diuréticos. También se conocen como diuréticos. Mediante el aumento de la micción, el fármaco ayuda a eliminar el exceso de líquidos y sales. Si padece problemas renales u otras dolencias renales, se recomienda considerar alternativas más seguras para reducir sus niveles de tensión arterial.
La furosemida puede provocar algunos efectos secundarios no deseados, como ganas de orinar, dolores de cabeza, debilidad, cansancio, etc. Muchos de estos efectos secundarios comunes se etiquetan como molestias menores. Lo bueno es que estas molestias pueden dejar de aparecer en cuanto su organismo se adapte a los principios activos del medicamento. En algunos casos poco frecuentes, la furosemida ha causado afecciones cutáneas como picor, erupciones cutáneas, descamación de la piel, ampollas, así como coloración amarillenta de los ojos, decoloración de la piel, etc.
¿Se puede tomar cloruro potásico y furosemida?
Esta combinación se consume para tratar episodios graves de edema o acumulación de líquidos. Estos dos medicamentos se complementan entre sí. El uso de diuréticos (furosemida) provoca una pérdida potencial de electrolitos y minerales como el potasio. Por otro lado, el cloruro potásico ayuda a corregir el desequilibrio de potasio; por lo tanto, asegura el nivel correcto de dichos minerales en su sistema.
La coadministración de estos dos medicamentos se realiza estrictamente bajo el cuidado clínico y la orientación de un médico cualificado. El valor de la dosis de cloruro potásico debe estar en consonancia con la pérdida de minerales (es decir, debido principalmente a la ingesta de diuréticos). Una dosis mayor sólo puede empeorar el desequilibrio. Una dosificación incorrecta de cloruro potásico puede provocar hiperpotasemia (presencia abundante de potasio) o hipopotasemia (deficiencia de potasio).
También se aconseja estar atento a los efectos secundarios de este tratamiento combinatorio. Las principales molestias incluyen dolor en el abdomen, descenso de los niveles de magnesio, disminución acusada del calcio en sangre, problemas abdominales como náuseas, vómitos o indigestión. En algunos casos puntuales, los usuarios han notificado signos de aumento de los niveles de ácido úrico.
En general, es posible que las mujeres embarazadas deban evitar tomar diuréticos; se necesitan más investigaciones/estudios para establecer el bienestar del feto al tomar diuréticos. Además, no es seguro quedarse embarazada cuando se consume furosemida. Habla con tu médico e infórmate sobre las medidas anticonceptivas no hormonales (puedes elegir entre una amplia gama de anticonceptivos como parches cutáneos, anillos vaginales u otras medidas similares). Las sustancias químicas clave de la furosemida pueden pasar a la leche materna. Por lo tanto, se desaconseja a las mujeres en período de lactancia utilizar este medicamento diurético.
En resumen, se administra una combinación de cloruro potásico y furosemida para tratar los episodios agudos de acumulación de líquidos. La administración de furosemida desencadena una pérdida de potasio, mientras que el cloruro potásico corrige este desequilibrio y mantiene el mineral en un nivel óptimo. Una dosis incorrecta de esta combinación puede provocar una cuota abundante de potasio o una carencia. Por lo tanto, recuerde que la administración conjunta de estos medicamentos debe realizarse siempre bajo la supervisión de un médico cualificado.