
Los fármacos que actúan como relajantes musculares se clasifican a grandes rasgos en antiespasmódicos y antiespasmódicos. De estos dos subgéneros, los antiespasmódicos actúan para tratar los espasmos musculares; los antiespásticos ayudan a tratar la espasticidad de los músculos. Es esencial saber que algunos medicamentos del género de los antiespasmódicos (como la
tizanidina
) pueden tratar la espasticidad. Pero los antiespasmódicos no pueden tratar los espasmos y los calambres. Pero, ¿se pueden comprar antiespasmódicos OTC, es decir, de venta libre? Es clave saber más sobre esto.
Los calambres se producen cuando hay una tensión excesiva en el músculo; es probable que sufras un espasmo debido a afecciones como la fibromialgia. Los espasmos suelen ser el resultado de una contracción repentina / espasmódica e involuntaria de los músculos. Quienes padecen dolor de espalda (sobre todo lumbar) y dolor de cuello son propensos a sufrir espasmos. La mayoría de los espasmos se producen en un lapso de tiempo más breve y el músculo subyacente tiende a normalizarse en unos minutos.
La espasticidad muscular está relacionada con lesiones de la columna vertebral o el cerebro. Se trata de un episodio continuo de tensión muscular o espasmo; desencadena el agarrotamiento de los músculos, la tensión y la rigidez de los tejidos. Estas afecciones pueden causar dolor al caminar o realizar cualquier movimiento corporal.
¿Qué son los antiespasmódicos?
También se denominan medicamentos relajantes del músculo esquelético (RME) de acción central. Se suelen prescribir con fisioterapia y mucho reposo. Sustancias químicas activas presentes en
antiespasmódicos
provocan una sensación sedante y también impiden que las señales basadas en el dolor lleguen al cerebro. El uso prolongado de estos medicamentos puede provocar resultados adversos; el plan de medicación típico no dura más de 2 ó 3 semanas.
¿Puedo adquirir un antiespasmódico sin receta?
Es una práctica segura administrar medicamentos antiespasmódicos bajo la supervisión clínica y la orientación de un profesional sanitario cualificado. El equipo asistencial le explicará las ventajas de los antiespasmódicos (frente a los antiinflamatorios no esteroideos – AINE). Hay algunos medicamentos genéricos y variantes de marca entre los que elegir. Los medicamentos genéricos incluyen
ciclobenzaprina
, tizanidina, carisoprodol, etc.; sus homólogos de marca son fexmid, Zanaflex, soma, respectivamente.
Antes de consumir medicamentos antiespasmódicos, es esencial que el médico tratante esté al corriente de las dolencias preexistentes y actuales, si las hubiera. Puede ser muy útil para los profesionales sanitarios que le atiendan si puede compartir detalles de su historial clínico, especialmente de disfunción renal o bajada de tensión (una afección conocida como hipotensión), etc. Además, quienes padezcan problemas relacionados con el hígado, como inflamación hepática o cirrosis, deben informar a su médico de tales condiciones clínicas.
Se aconseja no tomar alcohol (ni bebidas con alcohol) mientras se utilicen medicamentos antiespasmódicos. La mezcla de drogas con bebidas alcohólicas puede desencadenar efectos muy adversos y molestias graves, como somnolencia aguda, mareos y dificultades para mantener la concentración. Es fundamental que informe a su médico sobre sus hábitos de consumo de alcohol y otros hábitos de vida antes de tomar antiespasmódicos.
Por último, las personas de 50 años (y más) pueden vivir con una tasa de filtración subóptima de su sistema renal. Debido a la disminución de la tasa de filtración, las personas mayores pueden necesitar un plazo bastante largo para que los fármacos sean procesados por sus riñones. Los riesgos de efectos secundarios son más pronunciados cuando los residuos de antiespasmódicos permanecen más tiempo en el organismo. En estos casos, su cuidador puede administrarle medicamentos antiespasmódicos con una dosis menor.
Para saber más sobre los antiespasmódicos, le aconsejamos que hable con su equipo asistencial antes de iniciar el plan de tratamiento. Además, como algunos de estos fármacos pueden provocar algunos efectos secundarios adversos -entre ellos, migrañas/dolor de cabeza, nerviosismo o inquietud y mareos excesivos-, tome las precauciones necesarias tras consultar con el médico que le trata.
Descargo de responsabilidad
La información aquí facilitada sólo tiene carácter complementario. La información que aquí se comparte no sustituye el consejo de un médico cualificado. Este sitio web no sugiere el consumo de este medicamento como seguro o apropiado. De ahí que se aconseje hablar con su médico antes de consumir este medicamento o cualquier otro.